El International Spy Museum en Washington D.C. Estados Unidos, ha encontrado la manera de asustar a sus visitantes y de enseñarles a no golpear los vidrios de los animales.
El museo alberga una exhibición de tiburones y en una zona del inmueble, que se asemeja a un acuario, se observa a un hombre frente a lo que parece ser una enorme pecera.
En el frente de la pecera hay un letrero con la leyenda toca bajo tu propio riesgo, y por supuesto que el hombre no dudó en romper las reglas y comenzó a tocar el vidrio.
Durante unos segundos parece que no hay nada malo, simplemente muestra un tiburón. El hombre continúa tocándolo, y cuando menos se lo espera, un enorme tiburón se estrella contra el vidrio y lo cuartea; por la sorpresa y el susto termina en el piso.
La pecera es en realidad una pantalla táctil, que busca trollear a los asistentes del museo y más a aquellos que deciden no seguir las instrucciones del museo.
CON SUS PROPIAS MANOS, MUJER DEVUELVE A UN TIBURÓN AL MAR
Melissa Hatheier, una agente inmobiliaria australiana, sacó con sus propias manos a un tiburón de un metro de longitud atrapado en una charca de Oak Park para devolverlo al mar el pasado lunes. Según ella misma declara al medio australiano The Leader, su madre le llamó y le dijo que había un tiburón en la charca, así que se dirigió junto con sus hijos hasta allí. Al constatarlo, ni corta ni perezosa se metió en el agua para liberarlo.
Su hija Shannon grabó el momento, y su agencia de inmobiliaria publicó el video en su cuenta de Facebook, donde se ha convertido en viral. En declaraciones a The Leader, Hatheier se mostró muy sorprendida por la atención que ha causado su acción.
Solo quería coger un pequeño tiburón. Si hubiera tenido dientes grandes no lo hubiera hecho, aseguró.
Melissa dijo que no sabía si se trataba de un tiburón wobbegong o port jackson, ambos inofensivos para el ser humano.