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Julio 05, 2017 12:00 AM

Señalan que Rolando Zapata podría ser el siguiente de la lista de ex gobernadores en líos con la justicia




A un año y tres meses de que Rolando Rodrigo Zapata Bello concluya su mandato como gobernador de Yucatán, ya lo tiene bajo la lupa el Gobierno Federal, por señalamientos que lo ubican como "promotor de la corrupción", al mantener en su gabinete a gente ligada con la delincuencia organizada, incluso con el narcotráfico; además de proteger a los ex funcionarios de Roberto Borge Angulo, que se refugiaron en la ciudad de Mérida, se informa en el Sol Yucatán.
Polémica trayectoria
Desde junio de 2012, tres meses antes de que fuera ungido como gobernador de Yucatán, fueron presentadas cinco denuncias contra Rolando Zapata Bello ante la entonces titular de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), Imelda Calvillo Tello, por realizar actos anticipados durante su campaña por la gubernatura.
Mantas, mamparas, lonas, laptops, espectaculares, todo con la imagen del entonces diputado federal, eran una evidente violación al artículo 134 de la Constitución y al 25 del Reglamento para regular los procesos de selección de candidatos a cargos de elección popular y precampañas en Yucatán, el que establece que los servidores públicos sólo pueden difundir su imagen cinco días antes y siete después de su informe anual de actividades.
Las pruebas eran contundentes, pero como el gobierno ya era priísta las denuncias no prosperaron y Rolando Rodrigo llegó a gobernador, pese a lo discutible de su triunfo.
Tres años después, el 22 de abril de 2015, el Partido Acción Nacional denunció al ya mandatario y al candidato a la alcaldía de Mérida por el PRI-PVEM, Nerio Torres Arcila, por el uso indebido de recursos públicos para campañas electorales, uso abusivo de funciones y tráfico de influencias.
En la acusación se detalló, que Nerio durante su gestión como secretario de Desarrollo Social de Yucatán, con la autorización de Zapata Bello, adquirió 21 mil tinacos y 15 mil estufas con un 20% de sobreprecio, con lo que se incurrió en uso indebido de los fondos destinados al Programa de Atención de Zonas Prioritarias y daños al erario por más de 11 millones de pesos.
Un mes después, el 11 de mayo de 2015, Patricio Patrón Laviada denunció a Ivonne Arecelly Ortega Pacheco, a Rolando Zapata, Álvaro Quijano Díaz, ex secretario de salud estatal y a Ángel Córdova Villalobos, ex secretario federal de salud, por el desvío millonario de fondos destinados a la construcción del hospital de Tekax.
Previamente, la acusación fue formulada también ante VIRGILIO ANDRADE
MARTINEZ, entonces secretario de la Función Pública, pero no hubo pronunciamiento alguno.
La construcción de dicho centro hospitalario, tardó más de 11 años y el costo estimado de su edificación, rebasó casi al doble de lo previsto, además de que a la fecha, el nosocomio opera solamente al 70 por ciento, ya que hay diversas carencias de personal médico, medicamentos, equipo e instrumental.
En otro aspecto, al tomar posesión Zapata Bello su primera acción fue reciclar en su gabinete a ex funcionarios de la pasada gestión, entre ellos Víctor Caballero Durán, Sergio Martín Vadillo Lora y Luis Felipe Saidén Ojeda, severamente cuestionados por su historial.
A Caballero Durán, que inició la administración como secretario de Gobierno –cargo del que se separó para coordinar las campañas del Revolucionario Institucional en la elección del pasado 7 de junio–, se le acusa de estar implicado en un fraude por más de 500 millones de pesos en las cajas de ahorro Crecicuentas y Hagamos Más.
No obstante las acusaciones en su contra, la autoridad judicial se ha negado a investigar y Zapata Bello, tuvo a bien designar al presunto defraudador como titular de la Secretaría de Educación del Estado.
Asimismo, el secretario de Seguridad Pública, Luis Felipe Saidén Ojeda, quien ha ejercido ese cargo en tres sexenios, primero con Víctor Cervera Pacheco, luego con su sobrina, Ivonne Ortega y ahora
con Zapata Bello, ha sido ligado desde un principio con el crimen organizado y no obstante los señalamientos se le sigue sosteniendo en el cargo.
Actualmente, el estado de Yucatán continúa siendo uno de los principales corredores del narcotráfico y hoy, como hace 30 años, el jefe de la policía sigue siendo Saidén Ojeda.
Cabe recordar que fue Víctor Cervera Pacheco quien, como mandatario de Yucatán, ayudó a evadir a la justicia al ex gobernador quintanarroense, Mario Ernesto Villanueva Madrid y fue su jefe de
policía, Saidén Ojeda, el operador principal para ocultar al principal protector de Amado Carrillo Fuentes, "El Señor de los Cielos".
Diez y nueve años después, llegó como gobernadora su sobrina, Ivonne Ortega y designó como su jefe de policía nuevamente a Saidén Ojeda.
Su nombramiento despertó inconformidad y los reporteros de la "fuente" del gobierno del estado comentaban con sorna los frustrados operativos del jefe policíaco.
En uno de ellos lo describían vestido de comendo, fuertemente armado, al frente de sus hombres y cuando llegaba al punto del objetivo, retador, insultante, gritaba:
"¿Dónde están? ¡Salgan maricones! ¡Putos! ¡No se escondan como ratas!".
Días antes, el 31 de agosto del 2008, un año después de que Ivonne asumiera la gubernatura, la mafia le había dejado un macabro y aterrador mensaje, junto con 12 narcomenudistas decapitados, en la esquina de Mérida y Buctzotz: "Por no respetar los tratos, tú eres el culpable de lo que pase, Luis Felipe Saidén Ojeda".
En uno de tantos operativos, una camioneta circuló a baja velocidad exactamente por donde se encontraba Saidén, quien sólo se limitó a observar el vehículo sin ordenar a sus hombres que lo interceptaran y lo detuvieran, lo que arreció las mofas de los chicos de la prensa.
Ante los frecuentes cateos fallidos, comentaban con sarcasmo que cada vez que llegaba la policía a tal o cual predio, éste ya había sido abandonado, lo que evidenciaba que los narcos habían sido previamente alertados.
Por ese tipo de situaciones, Ivonne fue llamada a la capital del país para reunirse con el entonces secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván y otras autoridades del gabinete de Seguridad.
Se desconoce qué hablaron, pero Saidén permaneció en su puesto.
Ahora, bajo el mandato de ZAPATA BELLO, nuevamente Saidén Ojeda es jefe de la policía y el narcotráfico continúa operando impunemente en el estado, como lo demuestra el descubrimiento de varios contenedores descargados del buque "San Adriano", procedente de Guayaquil, Ecuador,
cuyo destino final era municipio de Progreso, principal puerto de Yucatán, que, aparentemente, sólo transportaban 24 toneladas de pez vela congelado.
Entre la carga, fue descubierta una tonelada de clorhidrato de cocaína, droga de la más alta pureza, de la cual se obtienen siete tantos más, es decir, 8 mil kilos del alcaloide.
La Procuraduría General de la República inició la carpeta de investigación correspondiente y las indagatorias para determinar con exactitud el remitente y destinatario del alcaloide pero no se ha
sabido nada m en cuanto a Saidén Ojeda, éste sigue firme en su puesto.
Otro referente del personal de Zapata Bello, es el clan de los Vadillo Lora, integrado por Sergio Martín, Diego y José Luis, quien son los que se encaran de hacer el "trabajo sucio" del gobernador.
El primero, como jefe de Despacho del gobernador de Yucatán, maneja un equipo de "trabajo" de 200 hombres a los que paga en efectivo para que no figuren en ninguna nómina del gobierno estatal y, por ende, no puedan ser ubicados como trabajadores gubernamentales.
En una de sus reuniones, Sergio Martín advirtió a su grupo de choque que a quienes sorprendiera subiendo a la red cosas negativas de su patrón (Rolando), de él o de su familia, simplemente "lo desaparecía".
"Ustedes saben que somos nosotros los que hacemos el trabajo sucio del gobierno, Yo tengo todo el respaldo para tomar decisiones. Así que al que pesque subiendo pendejadas a las redes, lo desaparezco y ustedes saben que puedo hacerlo", les dijo amenazante.
Los hermanos Vadillo han sido acusados por delitos que van desde el tráfico de influencias hasta la protección a ladrones, pasando por la venta y aprovechamiento de información confidencial, al encabezar, dirigir y controlar toda una red delincuencial, gracias a sus cargos en el Palacio de Gobierno.
Desde su posición como jefe del Despacho, Sergio ha protegido en innumerables ocasiones a su hermano José Luis, dedicado a la compra-venta de artículos robados. Su consanguíneo laboró en el Centro de Comunicaciones, Cómputo, Control y Comando (C4), de donde aún obtiene información privilegiada.
Vecinos de la familia Vadillo, acusaron que los hermanos compraron varios predios en la misma colonia, al menos media docena de inmuebles, uno de ellos en la Calle 39, esquina con la 72 A y la 74, cerca de la SSP, mismos que remodelaron y transformaron en suntuosas residencias, donde se observan lujosos automóviles último modelo.
Trascendió también que con la complacencia del secretario de gobierno, Roberto Antonio Rodríguez Asaf y en contubernio con el Jefe del Despacho y el secretario particular de Zapata Bello, se hacen negocios turbios operados desde las mismas oficinas del Gobierno del Estado,
por los hermanos Vadillo Lora.
La impresionante red de actividades de los Vadillo, se extiende desde la especulación en bienes raíces hasta el ejército clandestino que hace el trabajo sucio del Gobierno del Estado, pasando por la prostitución y el narcomenudeo, además de la venta clandestina de licor.
Ese es parte del equipo de Rolando Zapata, que en ninguna forma corresponde al gabinete honesto, transparente que prometió el mandatario estatal, quien en su toma de protesta, aseguró: "En la lucha contra el crimen, jamás daré un paso atrás. Estableceré una política sin precedentes y combatiré la corrupción ferozmente".
Por otra parte, ha sido más que obvia la protección que ha dado Zapata Bello, al menos a dos de los más importantes operadores de Roberto Borge Angulo, que tomaron Yucatán como su guarida, concretamente la ciudad de Mérida.
Se trata de Eliezer Villanueva Lanz, que ha logrado eludir a la justicia al menos en dos ocasiones: una mediante el clásico "pitazo" y la otra cuando policías estatales se enfrentaron a ministeriales para rescatarlo, pues ya lo habían detenido y de Juan Pablo Guillermo Molina, ambos operadores financieros de Borge Angulo, confinado en una prisión panameña.
Cabe acotar que Zapata Bello hizo 227 promesas de campaña, de las cuales no ha cumplido  siquiera la cuarta parte y la principal, que era llamar a cuentas a su antecesora, Ivonne Aracelly Ortega Pacheco, que dejó endeudado a Yucatán con más de mil 850 millones de pesos, no la
ha cumplido.
Organizaciones no gubernamentales, políticos de oposición y legisladores hasta de su mismo partido, señalan que no se puede tratar de ningún "olvido" el no sentar en el banquillo de los acusados a su antecesora, sino que simplemente está comprometido, "pues no puede
morder la mano que le dio de comer, ya que la mujer lo mantuvo como su secretario de Gobierno durante su mandato.
Lo más grave para los más de 2 millones de yucatecos, es que a 15 meses de que termine la gestión de Rolando Rodrigo Zapata Bello, la deuda pública se ha incrementado al menos un 80 por ciento y todo apunta a que la cifra aumentará al doble de la que le heredó su jefa.


Publicado por:NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA

Admin Julio 05, 2017 12:00 AM Sin categoría