Dos sacerdotes mediaron ante las autoridades el fin de semana en la localidad de Tovar, en Venezuela, para que manifestantes que fueron heridos en medio de fuertes enfrentamientos con las autoridades, reciban atención médica.

El domingo 30 de julio, los sacerdotes José Torres y Omar Vergara, de la parroquia Nuestra Señora de Fátima, pidieron a los miembros de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que frenen la represión contra los manifestantes opositores al gobierno, y permitan que los heridos sean atendidos por voluntarios del equipo de Primeros Auxilios de la Universidad de Los Andes (ULA).

El equipo de Primeros Auxilios de la ULA denunció en Twitter diversas agresiones de las autoridades cuando intentaban atender a los heridos, e incluso que la PNB “encañonó” a sus miembros en Tovar “y les fueron robados tanto identificación como insumos”.

En un comunicado, Primeros Auxilios de la ULA señaló que efectivos de la PNB “llegaron al punto de amenazarlos de muerte y uno de nuestros voluntarios fue víctima de maltrato físico”.