Un frupo de científicos logró por primera vez registrar,
en profundidades oceánicas, el misterioso zumbido generado por el movimiento de
la Tierra, que desconcertó a estudiosos de todo el mundo durante décadas.
Desde el año 1959 los investigadores intentaron registrar ese zumbido, causado
por pequeñas vibraciones llamadas 'oscilaciones libres' que se desencadenan
constantemente por efecto de pequeñas expansiones y contracciones del globo
terráqueo. Y fue solo en 1998 que científicos japoneses lograron grabarlo en
tierra.
A pesar de que este raro fenómeno es conocido desde hace casi medio siglo, su
origen sigue siendo un misterio. Según una de las teorías, es producido por la
fuerza de olas oceánicas que golpean el fondo marino, indica
Informe21.
Otra apunta a la resonancia acústica, cuando la frecuencia de un objeto que
vibra coincide con la frecuencia natural de otro, haciendo que el segundo
objeto también vibre. Algunos otros científicos han planteado que la
turbulencia atmosférica podría estar causando el zumbido.
Silenciar al océano
Ahora, un equipo de científicos liderado por la geofísico Martha Deen, del
Instituto de Física de la Tierra, con sedeen París (Francia), ha logrado
arrojar un pequeño rayo de luz sobre el misterioso fenómeno, tras reunir 11
meses de datos recabados por 57 estaciones sismográficas colocadas por primera
vez en el fondo marino del Océano Índico, alrededor de la isla de Reunión, al
este de Madagascar.
"Se necesita un bajo nivel de ruido para captar la pequeña amplitud de
señal del zumbido", escriben Deen y sus colegas en un artículo publicado
en la revista Geophysical Research Letters. "En el fondo del océano, el
nivel de ruido en períodos largos es generalmente mucho más alto que en
estaciones terrestres", especifican.
Después de silenciar los sonidos del océano y la interferencia electrónica, los
investigadores hicieron una referencia cruzada de sus grabaciones y las de una
estación terrestre en Argelia. Luego los científicos descubrieron que la
frecuencia de este ruido es de entre 2,9 y 4,5 milihertzios, que es casi 10.000
veces inferioral umbral de 20 hertzios del oído humano.
"Se puede utilizar el zumbido para estudiar el interior profundo de la
Tierra", afirman los investigadores. Mientras que generalmente los
científicos estudian los niveles internos del planeta mediante las ondas
sísmicas generadas por terremotos, que son ocasionales y de corta duración, los
datos del zumbido podrían ayudar a delinear con mayor precisión el interior de
la Tierra, ya que es un ruido constante.