(Apro).- Al igual que el presidente Enrique
Peña Nieto y el gobernador oaxaqueño Alejandro Murat, el precandidato de la
coalición Todos por México, José Antonio Meade, también tiene problemas para
conjugar los verbos.
Este domingo, en una reunión con simpatizantes del
Partido Nueva Alianza -procedentes de diversas entidades- en Tepeapulco,
Hidalgo, al exsecretario de Hacienda se le cruzaron las palabras y en su
discurso cometió un error al decir resolvido.
Y si nos aseguramos que esos seis retos están presentes,
que esos seis elementos los hemos resolvido de manera adecuada, habremos de
ser exitosos en materia de pobreza, dijo el precandidato esta mañana.
Meade cometió el desliz al responder a tres preguntas
hechas por militantes aliancistas de Michoacán sobre el tema de la
inclusión social y el desarrollo de los pueblos originarios.
Al precandidato también se le preguntó qué libros había
leído en su juventud; respondió que además de los clásicos, El llano en llamas y Pedro Páramo, además de novelas de
detectives, de Harry Potter y La sombra del caudillo.
El desliz de Peña Nieto
En diciembre pasado, en un discurso en París en la sede
de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), el presidente
Enrique Peña Nieto dijo ante líderes internacionales que México se ha volvido
referente internacional.
Días después el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat,
durante la declaratoria de Zona Económica Especial en Salina Cruz, a la que
asistió Peña Nieto, se equivocó al conjugar el verbo abrir.
Durante la historia de México, se ha abrido una gran
brecha entre el sur y el norte de México. Hoy nos entusiasma porque volvemos a
obtener optimismo, confianza de que con esta declaratoria podremos empezar a
delinear el nuevo rostro del desarrollo del sureste, dijo Murat en aquella
ocasión.