Un cohete de SpaceX que voló hace dos meses con un satélite de la NASA regresó a la acción el viernes, lanzando el primer robot orbital con inteligencia artificial y otros suministros para la estación espacial.
El cohete Falcon 9 despegó antes del amanecer, llevando consigo casi seis mil libras (dos mil 700 kilogramos) de carga, incluyendo el robot esférico Cimon, ratones genéticamente idénticos y café supercafeinado para la tripulación de la Estación Internacional.
El cargamento, a bordo de una cápsula Dragon que también es rehusada, deberá llegar a la estación el lunes.
Fue un lanzamiento especialmente hermoso, deleitando a los espectadores cuando la estela del cohete se expandió en el claro cielo de la madrugada como un halo gigante bajo una luna casi llena y un Marte brillante.
El mismo cohete lanzó en abril el satélite caza-planetas Tess. La cápsula, en tanto, voló en el 2016.
SpaceX, que busca reducir costos con el rehúso de cohetes propulsores, no retiró el Falcon 9 para otro vuelo, abandonándolo en lugar de ello en el Atlántico. La compañía va a cambiar a una nueva línea mejorada de cohetes.
La estación espacial y sus tripulantes volaban a una altura de 400 kilómetros (250 millas) sobre el Pacífico en el momento del lanzamiento.