La madre del vicepresidente de Ecuador pide al papa Francisco que interceda "frente a los verdugos"

 

 

Norma Espinel, madre del vicepresidente ejecutivo de Ecuador, Jorge Glas, ha enviado una misiva al papa Francisco para pedir una intermediación ante el presidente ecuatoriano Lenín Moreno.


"Le pido que interceda con el señor Lenín Moreno, para que detenga este abuso y frene la brutal persecución política de la que es víctima mi hijo Jorge", escribió la madre de Glas, luego de que un tribunal ratificara la condena de 6 años a su hijo por estar presuntamente implicado en la trama de corrupción de Odebrecht.
Para Espinel, la sentencia es una "injusticia" porque su hijo "fue hecho prisionero y condenado a través de todas las faltas posibles al debido proceso". La misiva, fechada el 14 de diciembre, fue enviada desde Guayaquil.
"Esperamos de su intervención"
Además de la carta, la madre de Glas grabó un video para el papa: "Yo apelo a su amor, a su buen corazón, que ayude a mi hijo, que está pasando por una situación tremenda".
"Usted, como enviado de Dios, representante de Dios acá en la Tierra, esta madre que está destrozada, una familia destrozada y también un país honesto destrozado, espera de su intervención ante el señor Moreno", agregó.
Espinel aludió a la probidad de su hijo al recalcar que fue por eso que el presidente Moreno "le pidió que fuese su binomio". De igual forma, se dirigió directamente al mandatario ecuatoriano para pedir la liberación de Glas, "porque la verdad sale a la luz del día".
Condena máxima
El pasado miércoles, los jueces Édgar Flores, Sylvia Sánchez y Richard Villagómez, de la Corte Nacional de Justicia en Quito, emitieron un fallo en el que encontraron culpable a Glas del delito de asociación ilícita. Además del vicepresidente, fueron condenados Edgar Arias, Ramiro Carrillo, Carlos Villamarín y Ricardo Rivera, tío de Glas.
La madre de Glas alegó que su hijo ha sido sometido a "un calvario de injusticias y abusos", y aseguró que él es "un hombre correcto, cristiano". No obstante, el Tribunal determinó que las acciones del vicepresidente y su tío, quien fungió como enlace, fueron clave para que Odebrecht obtuviera "contratos a cambio de retribuciones económicas ilegales".
Como reparación al Estado, los sentenciados deberán retribuir el pago de 33,5 millones de dólares. La defensa de Glas aseguró que apelará el fallo, mientras que el funcionario mantiene la versión de que se trata de una venganza política impulsada por Odebrecht, luego de que la empresa fuese expulsada de Ecuador en 2008 al constatarse fallos en la construcción de una central hidroeléctrica.
El abogado de Glas, Eduardo Franco Loor, ha tildado de inadmisible la condena porque el fiscal general "ni siquiera probó la existencia del delito" en los documentos entregados ante el tribunal, ni está el nombre del funcionario en la traducción de los papeles enviados por el Departamento de Justicia de EE.UU.

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