Guadalajara: Muere madre buscadora tras el ataque en su contra e intento de secuestro

Tras luchar por su vida en un hospital de Guadalajara, Jalisco, Teresa González Murillo, una incansable buscadora de desaparecidos, ha fallecido este miércoles. Teresita, como la conocían sus allegados, fue brutalmente atacada el pasado 27 de marzo en su domicilio, ubicado en la colonia San Marcos. Tres hombres armados irrumpieron en su hogar con la intención de secuestrarla, pero al no lograrlo, le dispararon en el rostro antes de huir. Desde entonces, permanecía en estado crítico hasta que su cuerpo no pudo resistir más. La Fiscalía de Jalisco ha abierto una investigación sobre el caso, aunque sostiene que el motivo del ataque pudo haber sido un robo.

El colectivo "Luz de Esperanza Desaparecidos Jalisco" confirmó su fallecimiento, lamentando que la notificación llegara primero a los medios antes que a sus familiares. Teresita también era una reconocida líder de comerciantes ambulantes en Guadalajara y había recibido amenazas previas. Según testimonios recopilados, se enfrentó tanto al crimen organizado como a las autoridades locales debido a su lucha por los desaparecidos y la defensa de los derechos de los comerciantes informales. Su valentía y compromiso la convirtieron en una figura clave dentro del movimiento de búsqueda en el estado.

Aunque testigos aseguran que la buscadora ya había sido amenazada, la Fiscalía ha descartado que el ataque estuviera relacionado con su activismo, señalando que el incidente pudo deberse a un robo. Según declaraciones oficiales, Teresa, de 53 años, llevaba consigo una cantidad considerable de dinero el día del atentado, el cual fue sustraído por los agresores. Dos de los atacantes huyeron en motocicleta, lo que según las autoridades sugiere que no hubo intención de secuestrarla. Sin embargo, sus compañeros de lucha insisten en que su papel como buscadora pudo ser un factor determinante en el ataque.

Un video difundido en redes sociales muestra a Teresita participando en una manifestación, exigiendo justicia para las personas desaparecidas: "No somos uno ni somos cien. Somos miles los que exigimos justicia". Estas palabras resuenan con mayor fuerza tras su trágica pérdida. La comunidad de buscadores se encuentra de luto y exige respuestas y justicia, pues su caso no es aislado. Recientemente, otros buscadores han sido víctimas de violencia, como Lorenza Cano en Guanajuato y Magdaleno Pérez Santes en Veracruz, sin que hasta el momento haya detenidos por estos crímenes.

La lucha de Teresa González Murillo continuará a través de sus compañeros y familiares, quienes seguirán exigiendo justicia y el esclarecimiento de su asesinato. Su historia refleja la preocupante situación de los buscadores en México, quienes enfrentan amenazas constantes por su labor en la localización de desaparecidos. A pesar del temor y la violencia, su legado perdura en la lucha incansable de quienes no descansan hasta encontrar a sus seres queridos.

Publicado por:NOTICIAS DE YUCATÁN